viernes, 5 de mayo de 2017

Tareas de casa (3A)

Vas a leer tres textos de un foro donde algunos chicos hablan sobre su colaboración en las tareas de casa. Relaciona cada pregunta con uno de los textos.

  1. MARIO. Mis padres trabajan y tienen unos horarios bastante difíciles, así que nos han acostumbrado desde siempre a colaborar en las tareas de casa. Somos tres hermanos con poca diferencia de edad y desde que teníamos más o menos siete u ocho años mis padres nos dieron a cada uno una responsabilidad. Mi hermano pequeño recogía la mesa, yo sacaba la basura y mi hermana mayor metía las cosas en el lavavajillas... Y, por supuesto, cada uno recogía su cuarto y hacía su cama. Ahora, hacemos más cosas. Por ejemplo, a cada uno nos toca preparar la comida un día de la semana por lo menos.
  2. DARIO. Nosotros somos tres hermanos. Mis hermanos mayores ya están en la universidad y yo estoy en primer año de bachillerato. Mi madre dice que tenemos bastante con los estudios, así que, durante el año, la verdad es que ayudamos poco en casa: recoger nuestro cuarto, hacer nuestra cama... Nada más.¡Pero durante el verano...! Mi madre dice que ella también tiene derecho a descansar, de modo que nos repartimos las tareas. A mí me toca lavar los platos y cubiertos después de comer y cenar. Tengo suerte, porque a mi hermano Luiss le toca cocinar y a Fernando poner la lavadora, tender y planchar. ¡Con el calor que hace!
  3. EDUARDO. No tengo hermanos. Mi madre no trabaja fuera de casa y mi abuela siempre ha vivido con nosotros y la verdad es que me han mimado un poco... Además, mi abuela es un poco anticuada y piensa que los chicos no tienen que hacer nada en casa. Y la verdad es que nunca he hecho nada, ni siquiera mi cama. Resulta que el año que viene voy a estudiar fuera. Voy a compartir casa con dos compañeros y tendremos que repartirnos las tareas de casa. Ahora me toca aprender a hacer de todo: cocinar, fregar...
  • ¿Quién tiene que fregar?
  • ¿Quién es hijo único?
  • ¿Quién es el hermano mediano?
  • ¿Quién cocina a veces?
  • ¿Quién colabora en casa solo en vacaciones?
  • ¿Quién ayuda en casa desde pequeño?

miércoles, 3 de mayo de 2017

Adolescentes peligrosamente sedentarios (2A)

Vas a leer un texto sobre los adolescentes y el deporte. Después, debes contestar a las preguntas, seleccionando la respuesta correcta.

En nuestro país existe una alta tasa de inactividad física por habitante. La mayoría de los jóvenes se declaran sedentarios y lo más preocupante es que cada vez dedican menos tiempo a realizar un deporte y prefieren ocupar su tiempo libre en ver la televisión o jugar con el ordenador.
En la última encuesta de salud en España, publicada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, la cifra de niños entre 5 y 14 años que no realiza ninguna actividad física es del 12% (8% en varones y 16% en mujeres). Esta cifra asciende al 35% entre los 15 y los 24 años (21,5% en varones y 49,5% en mujeres).
La inactividad física supone un riesgo importante para la salud física y psíquica de cualquier persona, pero además, en jóvenes y adolescentes, el ejercicio físico y la práctica de deportes favorecen un desarrollo global óptimo, su integración, el fomento de valores positivos y la adquisición de estilos de vida saludables. De hecho, la práctica regular de ejercicio físico ayuda a prevenir la obesidad, las enfermedades cardiovasculares, las alteraciones psicológicas, etc.
La adolescencia es un periodo vital de riesgo en el que se consolida la inactividad, lo que supone un riesgo importante para la salud física y psíquica de cualquier persona.
Algunos datos:
  • Dos de cada diez chicos y una de cada diez chicas de 15 y 16 años tienen sobrepeso u obesidad.
  • El porcentaje de chicas con sobrepeso u obesidad ha aumentado en los últimos 15 años.
  • La proporción de jóvenes que no hace ejercicio físico tres o más días a la semana ha aumentado un 17,6% en las chicas.
  • El número de chicos que ha realizado dietas de adelgazamiento casi se ha duplicado.
Para favorecer un estilo de vida saludable, la Asociación Española de Pediatría recomienda:
  • Realizar acctividad física moderada durante un mínimo de 60 minutos diarios (dos o más sesiones) e intercalar actividades vigorosas para el fortalecimiento muscular y óseo (tres veces por semana). La actividad física durante más de 60 minutos aporta beneficios adicionales para la salud.
  • Cualquier tipo de actividad cotidiana es mejor que el sedentarismo. Camina, utiliza la bicicleta y sube por las escaleras. Limita el tiempo frente al televisor y otros aparatos electrónicos.
  • Son preferibles las actividades en grupo, divertidas y al aire libre.
  • El entorno físico debe ser adecuado y sin peligros. Haz caso de las normas de seguridad para la práctica de deporte.
  • La actividad física adaptada a cada situación mejora globalmente el estado de salud y la evolución de personas con enfermedad crónica y discapacidad.
  • Toma líquidos, sobre todo cuando la actividad es intensa y el ambiente caluroso. Come de forma variada y equilibrada. Es un pilar fundamental para la salud junto con la actividad física.

Los días, los meses y las estaciones (1A)

Contraste de pasados (2A)