Todos los que han tenido la experiencia de ver un espectáculo de circo han
sentido la misma emoción cuando las luces se apagan: la música irrumpe dentro
de la carpa y el maestro de ceremonias en el centro de la pista presenta los
números que van desfilando en la pista.
No importa si el circo es famoso o no, si su grupo de
artistas es grande o pequeño; en todos los espectáculos de circo hay una serie
de números que son clásicos en su repertorio: magos que hacen trucos sacando
pañuelos o palomas de su sombrero. Payasos que se empujan, o se persiguen unos
a otros, que suben por escaleras que no están apoyadas a ninguna pared, o hacen
volar platos sin que caigan al suelo.
Entre los números de circo más famosos están los de los
acróbatas, malabaristas y trapecistas. Los acróbatas caminan en una cuerda
floja o tensionada, hacen pirámides humanas, se paran en las manos, en rollos y
barriles, y admirablemente se mantienen en equilibrio. Los malabaristas arrojan
pelotas u otros objetos al aire, y logran mantenerlos girando en el espacio
gracias a una gran agilidad y experiencia. Los trapecistas se balancean a gran
velocidad, vuelan en lo más alto, lanzándose al aire para hacer piruetas,
teniendo como única seguridad la confianza en las manos y en los brazos fuertes
de los compañeros que los recogen.
Todos ellos desafían las leyes de la física, según las
cuales un objeto está en equilibrio si todas las fuerzas que actúan sobre él no
alteran su estado inicial de reposo. Para los acróbatas y malabaristas la idea
de “equilibrio” es diferente, pues su trabajo es precisamente buscar que una
posición difícil de su cuerpo o de un objeto se mantenga en balance gracias a
movimientos imperceptibles para el espectador. Estos son posibles después de
horas, de años de entrenamiento, en los que su tarea ha sido buscar y dominar
el equilibrio.
Nosotros también hemos llegado a dominas el equilibrio
cuando aprendimos a caminar y también tuvimos que dedicarle horas de
entrenamiento hasta el momento mágico en que conquistamos la estabilidad en
nuestros pies.
Tal vez los malabaristas, acróbatas y trapecistas nos
gustan tanto porque nos recuerdan ese momento de nuestra vida en el que tuvimos
que repetir los movimientos miles de veces, exactamente como ellos.
VOCABULARIO: apagarse: spegnersi /
arrojar: lanciar / buscar: cercare
/ desafiar: sfidare / confianza: fiducia / empujar: spingere / floja: senza tensione / tal vez: forse
|
Contesta a las siguientes preguntas:
1.
¿Por qué es emocionante el momento inicial del circo?
2. ¿Qué números se pueden considerar tradicionales del circo?
3. ¿Qué hacen los payasos para hacernos reir?
4. ¿En que consisten los números de los malabaristas?
5. ¿Por qué nos gustan tanto los números de acrobacia y malabarismo?
6. ¿En qué nos parecemos todos nosotros a los acróbatas, malabaristas y trapecistas?
7. ¿Cuál es tu espectáculo preferido del circo?
8. ¿Estás a favor o en contra de los espectáculos del circo? Razona tu respuesta
2. ¿Qué números se pueden considerar tradicionales del circo?
3. ¿Qué hacen los payasos para hacernos reir?
4. ¿En que consisten los números de los malabaristas?
5. ¿Por qué nos gustan tanto los números de acrobacia y malabarismo?
6. ¿En qué nos parecemos todos nosotros a los acróbatas, malabaristas y trapecistas?
7. ¿Cuál es tu espectáculo preferido del circo?
8. ¿Estás a favor o en contra de los espectáculos del circo? Razona tu respuesta