En el mundo hay más de 40 millones de personas que viven en lugares por encima de los 3000 metros sobre el nivel del mar. El ambiente de altura es un complejo ecológico cuya característica fundamental es que a medida que se asciende se produce una disminución de la presión atmosférica; va disminuyendo también la presencia de sus componentes: oxígeno, nitrógeno, dióxido de carbono, lo que hace que la salud humana esté en sus límites porque la falta de oxígeno es causa de estrés en todo el organismo.
A esta falta de oxígeno se suman otros dos factores como la sequedad del aire dado que la cantidad de vapor de agua va disminuyendo en altitudes superiores; y el frío, puesto que en la altura la temperatura baja de 5 a 10ºC por cada 1000 metros de elevación. Factores que se someten a una persona que no ha nacido en grandes altitudes a sufrir las molestias propias del proceso de adaptación que debe hacer el organismo para poder sobrevivir a ese nuevo contexto.
El cuerpo al buscar satisfacer las necesidades de oxígeno de todos los tejidos, pero particularmente de aquellos que son más sensibles a su ausencia, como el cerebro y el corazón, aumenta el flujo sanguineo, y la reacción del cuerpo es entonces intensificar por minuto los latidos del corazón. Al darle prioridad a la oxigenación del cerebro y del corazón, el sistema digestivo se hace lento porque tiene menos oxígeno.
Además de la carencia de oxígeno, en el cuerpo se altera también la distribución de agua y minerales como el potasio y el sodio, lo que se traduce en cierto grado de mareo, dolor de cabeza e insomnio.
Lee las siguientes afirmaciones y decide si son verdaderas o falsas.
- Pocos seres humanos son capaces de vivir en ciudades que están a grandes alturas.
- Mientras más alto es un ambiente más baja es la presión atmosférica.
- El oxígeno, nitrógeno y dióxido de carbono no son escasos a grandes alturas.
- La mayor dificultad para el organismo a 3000 metros de altura es la falta de humedad.
- A grandes alturas disminuyen el vapor de agua y la temperatura.
- Solo algunos tejidos sufren la falta de oxígeno.
- El aumento de los latidos del corazón se debe al aumento del flujo sanguíneo.
- Los mareos y dolores de cabeza se deben al escaso oxígeno.
